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La oposición de Baiona no descarta una moción de censura en diciembre

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Los grupos de la derecha no apoyarán los presupuestos que presente la coalición PSOE-BNG. El alcalde también puede dimitir o presentar una cuestión de confianza al pleno.
Los miembros del PP, VIB y CM� podrían presentar una moción de censura contra el alcalde socialista, Luis Carlos de la Peña, antes de que acabe el año. La oposición mayoritaria no va a esperar más tiempo para resolver la crisis política que atraviesa el Ayuntamiento. La razón es que el Concello no puede seguir con unos presupuestos prorrogados desde el año 2001 y la coalición PSOE-BNG no va a conseguir apoyos para sacar adelante su programa económico del 2004.

La moción de censura es una de las tres opciones posibles para acabar con la inestabilidad política del Ayuntamiento provocada por la salida del gobierno de los tres ediles de Vecinos Independientes. El alcalde también puede optar por presentar los presupuestos al pleno asociados a una moción de confianza. Según la Ley de Régimen Local, si a los 15 días la oposición no ha conseguido pactar una moción de censura, entonces los presupuestos quedarán aprobados de manera automática. Este fue el camino que en el pasado mandato eligió el alcalde socialista de Nigrán, Manuel Rial Cadaval y que le permitió seguir, aunque en minoría, con unos presupuestos propios, porque la oposición no llegó a ponerse de acuerdo para hacer una censura.

Aunque es improbable, el regidor también podría dimitir en vista de la falta de apoyos para llevar a cabo su proyecto político. En ese caso, se volvería al mismo punto de partida del día después de las elecciones municipales. Los grupos tendrían que volver a negociar una nueva mayoría o dejar que gobierne la lista más votada.

Baiona funciona con unos presupuestos prorrogados desde el 2001 porque en julio de ese año el PP se pasó a la oposición y el alcalde Benigno Rodríguez Quintas ya no fue capaz de aprobar un nuevo programa económico. La actual situación de inestabilidad con un gobierno en minoría formado por 7 ediles (5 del PSOE y 2 del BNG) no garantiza que esta situación se vaya a corregir. Actuar con unos presupuestos desfasados es negativo para el Ayuntamiento porque se gasta sin consignación presupuestaria, la institución pierde credibilidad ante sus proveedores y, como ya sucedió en los últimos años, se pierden subvenciones de otras administraciones públicas al no tener consignadas las aportaciones locales

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