Social-demócrata, cristiano-progresista... A mí me suena Ronaldo a secas.
El tabaco, como el discurso político, mata. A ver si toman nota.
Físicamente, me duele; en lo espiritual, como a la sociedad.
La investigación sobre el Códice convoca a aportaciones que contemplen todas las hipótesis.
Soy anarquista de derechos. Sólo yo y solo.
El tíbio afronta sus responsabilidades de esa manera.
El envés del espejo está castigado de cara a la pared.
"Indignado", variante andaluza de la protesta.
Te echan al final de la jornada laboral, para darle suspense.
El correveidile tiene los días contados, pero más.
Hay que decir la verdad, por si es esa.
La galleta envasada al vacío lleva la resistencia dentro.
A la cena benéfica llega tarde, emperifollada, la presidenta.
Los etíopes no tienen qué comer. ¿Y por qué tiene qué?.
El malhumor terne no siempre es de jefe.
La restricción mental presupone cinismo o agudeza.
Me levantaré temprano, a ver si voy a parte alguna.
Hay que tomar con calma las cosas. Y ellas, que colaboren.
El capataz es productivo sólo en términos de autoridad.
Tengo una duda. Esperaré a tener más para ser inteligente.
Los invitados nada traen. Bueno sí: apetito.
El dentista te pregunta si duele, para actuar convencido.
La estadística, está disticamente, cumple un cometido.
No me consultan en los sondeos. Ya cuentan con lo que vaya a decir.
Los tópicos nos inclinan a indetificarnos con ellos.